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Bienvenidas y bienvenidos a NTJ o No Tenemos Jefe, el podcast donde hablamos de emprender con valores o cómo recargar pilas, ¡lo que nos dé la gana! Podemos ir de lo más técnico a lo más banal… si es que dejar de trabajar para recargar batería es banal.
¿Y quiénes hacemos este podcast? Pues Alberto González, Adrià Tarrida, Roberto Aresena y un servidor, Valentí Acconcia, todos emprendedores con pilas triple A.
Empecemos con el tema de hoy que, como habéis podido comprobar, es lo importante de descansar para que no se nos acabe la batería.
Trabajar, trabajar, trabajar… eso de que el trabajo dignifica es cierto, pero también lo es que el negocio no tiene sentido sin el ocio. Etimológicamente negocio es “negación del ocio”, así que, ¿cómo va a tener sentido el trabajo sin las correspondientes pausas para recargar pilas? Ya os lo digo yo, sin ocio no tiene sentido el negocio. Otra cosa es que haya gente que lo deje todo por el trabajo, que también la hay.
Pero, ¿es saludable? Supongo que eso tenemos todos claro que no. No es bueno para la salud estar 100% enfocado en el trabajo. Pero es que tampoco es bueno para la productividad no parar de trabajar.
Mirad, yo últimamente he tomado la dinámica de apagar el ordenador (no suspenderlo, apagarlo) cuando finalizo mi jornada. ¡Y me va de lujo! También estoy intentando alejarme del smartphone en diversos momentos de la jornada, y también me ayuda a refrescarme. En la otra cara de la moneda os tengo que contar que he tenido temporadas muy malas, en las que el trabajo ha llegado a saturar mi jornada, ocupando mi espacio de ocio e incluso mis horas de descanso. Y os tengo que decir que no es bueno, ni para el trabajo, ni para tus relaciones sociales, ni para nada.
Por eso hoy hablamos de recargar pilas, porque lo necesitamos. De irnos a la montaña, al mar, al cine o relajarnos en casa con un poco de ocio. Así veremos hasta qué punto el ocio es importante para emprender. El recargar baterías se ha convertido en una necesidad en un entorno en el que parece que quien no va a 1.000 por hora está perdiéndose algo. No es verdad. Lo que de verdad te pierdes si no paras de trabajar, es tu propia vida. Así que vamos a relajarnos y a valorar lo que significa recargar pilas.Y lo haremos con quien tiene las baterías en mejor estado de este grupo. Es decir, con el más joven (y guapo, con el permiso de Adrià) de NTJ. Hablamos de Rob, Roberto Aresena, que nos dará una masterclass de recargar pilas. ¡Vamos a por ello!
Sección: No sin batería
La idea de este episodio viene inspirado en parte por la newsletter de Alberto González. Hace ya un tiempo, el pasado 19 de Junio, Al escribió una newsletter bastante interesante, llamada “No he tenido tiempo”. Esa semana había ido tan hasta arriba que no había tenido tiempo de preparar un tema interesante sobre el que hablar y fue precisamente sobre eso, donde sacó, para mí, un email con una reflexión muy interesante.
Tengo varios temas apuntados para preparar episodios para No Tenemos Jefe, pero aunque me apetece hablar de ellos, no he tenido la inspiración ni fuerzas esta semana para prepararlos. En concreto, son temas a los que les quería dedicar tiempo para aportar un episodio bastante trabajado. Sin embargo, esta semana ha sido agotadora, y de ahí e inspirado por Al, quería sacar este episodio.
Eso sí, por favor, no me malinterpretéis. He trabajado el capítulo igual que lo hago siempre.
En concreto, como ya bien ha explicado Val, quería hablar de la importante que puede ser descansar y abrir debate sobre si le prestamos suficiente tiempo a ello. No quiero extenderme mucho porque creo que es más interesante ponernos a hablar todos sobre ello pero antes quiero poner un poco de contexto para situar el tema de hoy.
En mi caso particular, fue hace ya dos años casi tres que empecé con mi primer proyecto. Es decir, el momento en el que montas tu primer proyecto sobre el que tienes que generar dinero al menos para subsistir cuanto antes. Y siento que desde entonces no he descansado ni un minuto, la verdad. Ya no solo porque desde entonces no me he ido de vacaciones ni he descansado como solía hacer antes en verano, por ejemplo sino porque aunque me haya tomado una semana en Agosto más de relax, no he conseguido despejar del todo la cabeza. Siempre estás pensando en qué puedes hacer, cómo puedes hacer esto o incluso ideas que puedes hacer para el futuro, pero no consigues despejar la cabeza. Aquí es obvio que el método que es cierto que, a mi mejor me ha funcionado y ya hemos hablado en el podcast es meditar.
Sin embargo y, a pesar de que últimamente he vuelto a ello, hay días en los que sin más, tu motivación se cae absolutamente por los suelos. No entiendes por qué o sí, pero tal vez el motiva no esté muy claro sino que simplemente, te pega un bajón brutal. Y creo que lo mejor en esos momentos, es admitirlo, tomarte un descanso, olvidarte de todo y retomar pilas. No le demos vueltas, descansemos hoy, mañana será otro día.
Como emprendedores, tenemos cosas muy buenas y cosas muy malas y esta creo que es una de ellas. Me explico:
- Por lo general, nos gusta trabajar, disfrutamos con ello. Básicamente porque estamos creando, estamos lanzando nuestros propios proyectos y, por eso, nuestra obsesión con la productividad y trabajar mucho para sacar todo adelante.
- Sin embargo, no somos máquinas. Tenemos un límite y como cualquier trabajo aunque por lo general disfrutes como un niño, el día a día (la vida real) tiene muchos problemas que tienes que solucionar y llevarlos contigo. Por eso, no deberíamos perder el sentido de nuestro efusividad por trabajar y por conseguir todo lo que queremos y olvidarnos de nosotros mismos y de una de las cosas más importantes, el OCIO. Y esto os lo dice un tipo, que se pasa el día con la frase “trabajar, trabajar y trabajar” jajajajaja es una coña realmente, pero es cierto que tengo un problemilla con ello.
- Otra cosa que también he visto es a gente con alma emprendedora que en un momento, se encuentra trabajando por cuenta ajena y, al tener ese gen dentro, he visto cómo se aprovechan de él para que trabaje más de la cuenta. Es decir, del mismo modo que es algo diferenciador a la hora de contratar a alguien, puede ser una característica perfecta para que el listo de turno, se aproveche de tu pedazo de motivación y ganas de sacar las cosas adelante para que te esté explotando y esa persona no darse ni cuenta. Pues no, eso no va a funcionar porque va a acabar explotando.
- Y por último, destacar que a veces se nos olvida y en los momentos de ocio o distracción es cuando surgen las mejores ideas. Y si, ¿para nuestra próxima reunión de cómo podemos monetizar No Tenemos Jefe lo hacemos mientras jugamos a un juego de mesa o a Animal Crossing o al World of Warcraft? Ahí lo dejo 😉
Para terminar la sección quería antes comentar otros contenidos que me han encantado y que también me han servido de inspiración para este episodio.
Proyectos que te quitan salud
Como he comentado, ayer para mi fue un día en el que de repente perdí toda mi motivación, me sentía perdido, extraño y empecé a planteárselo todo ¿qué estoy haciendo? ¿esto tiene sentido? ¿estoy bien? ¿me aportaría más tranquilidad a mi vida algo más estable? ¿estoy equivocándome yendo en esta dirección? Y, en esta ocasión, la verdad es que me respondía a todo super tanjamente. “Por supuesto, aquí es por donde quiero ir, me encanta este camino, soy feliz y este no es el motivo de porqué estoy así”.
Recalco, en esta ocasión, esto fue lo que me ocurrió a mi pero no tiene porque ser igual para el resto y me ha ocurrido de forma distinta en otros momentos. Pero en mi caso, la razón era porque hacía un par de días que había entregado el Trabajo Fin de Grado y, como he manifestado en otras ocasiones, la universidad me quita energías, todas y cada una de mis energías. Y me doy cuenta que mientras estaba haciendo el trabajo, mi motivación era acabarlo cuanto antes para, por fin, poder olvidarme de todo y centrarme solo en mis proyectos y en el ámbito profesional pero es tanta fuerza, voluntad y energía la que me quita que cuando por fin lo acabo es como si me hubieran quitado toda mi felicidad. Y así estaba ayer. Para que se entienda un poco mejor, no sé si a Al, Ad o Val les habrá pasado en alguna ocasión con un cliente o un proyecto en el que estás trabajando en desagusto y solo lo haces porque tu única motivación es acabarlo cuanto antes pero no te aporta nada y encima te cuesta tu valioso tiempo y dinero. Una vez lo has acabado, te viene un bajón brutal.
Para este tipo de situaciones, me identifico muchísimo con la reflexión que hizo Roger Viladrosa en su podcast Marketer sin filtros. En este episodio, Roger explica cómo después de su último cuatrimestre en la universidad donde trabajo como un cabrón, lo que más estaba deseando es tras graduarse poder quitarse esa increíble carga de encima y centrarse en lo que más quería, su negocio. Pero una vez lo consiguió, se vino abajo y no era capaz de trabajar la misma cantidad de horas que lo iba haciendo anteriormente. Por suerte, en mi caso, no me ha pasado esto esta vez pero si me ocurrió el año pasado cuando estaba en plena campaña de Ulvmand y haciendo exámenes al mismo tiempo. Lo que Roger plantea es que cada persona tenemos un número de horas disponibles al año, como si fuera una batería y si tu vas a mitad de tu año y de tus 2920 horas disponibles, has agotado el 80%, solo te van a quedar un 20% para el resto del año. Puede sonar algo extraño, pero de verdad que lo creo profundamente porque puede que después de hacer eso tras una mala época, el resto del año no vayas a rendir la misma cantidad de tiempo, pases a ser más improductivo o aunque les estés dedicando el mismo número de horas, no seas capaz de estar el mismo tiempo concentrado.
Esto es algo parecido a lo que Bosco Soler habla en este post de su blog, a consecuencia de un tweet de José Carlos Cortizo.
Lo que comenta Bosco es parecido a lo que ya hemos comentado. Es como que hay días que son días en los que simplemente estás “de bajón” y son días de mierda. Días en los que se queda en la cama hasta las tantas y como que pierde su fé, empieza a compararse con otros y se plantea si lo que está haciendo tiene sentido. Hace una muy buena analogía con como si tuviéramos un combustible que se parece mucho a la fe ciega en uno mismo, lo que explicaría el por qué tanta gente sigue montando empresas cuando la probabilidad de fracaso es el 90%. Y lo que más me gusta del post además de que la principal razón por el que lo escribió es para fomentar que se hablara de ello es esta frase que cito literalmente de sus palabras:
Siento que, a escala individual, el poder de la libertad conlleva la responsabilidad de decidir. Cuanto más libre eres, más decisiones puedes tomar. Y más decisiones debes tomar en tu día a día.
Por último, quería hablar que no solo me parece importante que durante estos días de mierda, te tomes un respiro, hagas deporte, te diviertas, veas Disney+, una película, juegues o lo que te de la gana sino que es algo que debemos hacer diariamente. Y con esto quiero decir que es muy importante que le prestemos mucha atención a nuestro ocio y a consumir contenido y material que no sea de tu sector o del trabajo. Un ejemplo es que, en mi caso últimamente, he dejado por un tiempo de escuchar podcasts sobre emprender (un ejemplo sería este, querido oyente) y me he puesto a escuchar podcasts sobre historia o ficción como contenido único y principal. No sabéis lo que me ayuda a olvidarme un poco de todo, desconectar y no sentir la presión constante de “escucha este contenido sobre ecommerce o marketing que sino te desactualizas”. Y bueno, haciendo alusión a nuestro episodio No sin podcasts quería dejaros los podcasts que he estado escuchando y me ayudan a desconectar, aprender de otra cosa y entretenerme:
- XRey de Spotify
- La línea invisible
- Homecoming
En definitiva, creo que es importante que hablemos de este tema. De los días de mierda, que nos expongamos, nos abramos y todos seamos conscientes de ello. No solo para tener una mejor realidad sobre qué es esto de emprender sino para que todos los que estamos en ello, seamos conscientes de que es algo que nos pasa absolutamente a todos (desde a ti hasta a Mark Zuckerberg). Como emprendedores, al menos yo, llevo unos años en los que no he descansado nada y te rompe.Vaya, chicos, dos cosas: después de esta chapa ¿vamos a descansar en No tenemos Jefe? y ¿le damos caña al debate?
Debate y preguntas
- ¿Qué opináis? ¿Alguna vez habéis tenido esa sensación de que se os desgasta vuestra batería?
- ¿Habéis sentido alguna vez que un proyecto en concreto os quita todas las energías? ¿Os viene a la mente algún caso especial?
- ¿Intentáis cuidar esta parte en vuestro día a día? ¿Qué hacéis para ello? A parte de meditar 😉
- Artículo New York Times, ¿qué opináis?
- ¿Cómo veis lo de jugar a algo para pensar ideas?
Enlaces de interés
- El valor de ser mediocre
- Fenología
- La salud mental de El Rubius
- Messy the power of disorder
- Range: Why Generalists Triumph in a Specialized World
Cierre
Gracias por estar ahí, al otro lado del micro. Nos despedimos hasta el miércoles que viene a las 12:12 horas. Aunque nos podéis escuchar cuando os dé la gana, que para eso esto es un podcast.
¡Hasta el miércoles que viene, os deseamos muy buenas y creativas jornadas!
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