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Bienvenidas y bienvenidos a NTJ o No Tenemos Jefe, el podcast donde hablamos de emprender con valores o de cómo nos distraemos mientras curramos, ¡lo que nos dé la gana! Podemos ir de lo más técnico a lo más banal… si es que hablar de distraerse es banal.
¿Y quiénes hacemos este podcast? Pues Alberto González, Adrià Tarrida, Roberto Aresena y un servidor, Valentí Acconcia, todos emprendedores con algunas distracciones que otras.
Empecemos con el tema de hoy que, como habéis podido comprobar, es cómo evitar o abrazar las distracciones.
¿Sabéis que de pequeñito en la escuela que tuve cuando llegué a España le llegaron a decir a mi madre que era disléxico? Pobrecitos, no sabían con quién estaban hablando. Mi madre les contestó que aprendí a leer solo, sin haber ido todavía a la escuela. Toma respuesta. Se ve que iba a mis padres y les iba preguntando “¿esta letra cuál es?” y al rato volvía y preguntaba “¿y esta otra?”. Y ala, así aprendí a leer solo.
Sí, soy raro, friki, y mi madre dice que inteligente. Pero lo que está claro es que no soy ni he sido nunca disléxico. Pero oye, si lo hubiera sido, ningún problema. Os comento esto por otra cosa. Voy concretando.
El hecho es que dijeron que era disléxico porque yo llevé muy mal el cambio de país y de escuela. Es lo que hay, me afectó y me desorientó mucho. Y no rendía en clase, me distraía con facilidad. Muchas veces las “distracciones” responden a algo que va más allá del mero hecho de la distracción. En ocasiones una chavala o un chaval que no atiende en clase puede ser muy inteligente. No siempre lo aparente es la realidad.
Luego está el hecho de intentar reducir las distracciones cuando trabajamos. Que también es algo necesario, no vamos a negarlo. Pero, recordemos, las distracciones no siempre son malas, ni siempre indican que estés rindiendo menos. Por lo menos en mi opinión, oigan, que el episodio de hoy no lo lidera el mendas.
Lo lidera Adrià, que lee más que yo, es más guapo que yo, y la tiene más larga que yo… la barba. Así que vamos a ver qué nos cuenta que seguro que será interesante, y luego abriremos debate.
¡Vamos!
Sección
Este capítulo podría verse como una continuación del último que lideré: el 65 – No sin gancho.
En ese episodio, hablábamos del libro de Nir Eyal – Hooked. En el nos explicaba con un sencillo proceso, cómo podemos crear productos que enganchan. Si no lo habéis escuchado, dadle una oportunidad aunque no vayáis a diseñar ningún producto, ya que es muy interesante entender cómo nos intentan manipular, algunas veces de manera benigna y otras veces como el doctor de Austin Powers: maligna mwahahaha.
Y en el episodio de hoy, vamos a tratar del siguiente libro de Nir – Indistractable. Ahora que ya sabemos cómo los creadores de productos nos enganchan, es la hora de retomar el control y volvernos indistraibles!!!
Como no podría ser de otra manera, Nir nos lo hace entender de manera muy sencilla.
Uno de los conceptos claves es que lo contrario a la distracción es la tracción. Es decir, que las distracciones son todo aquello que nos apartan de esas acciones que nos van a llevar a nuestros objetivos. Por ejemplo, si después de un día de trabajo concentrado dedicamos un rato a ver videos en YouTube, eso no es una distracción, es simplemente un hobby. Distracción sería si nos ponemos a ver videos en YouTube cuando deberíamos estar escribiendo un blog post, por ejemplo.
El segundo concepto clave, para mi, es que el motivo de las distracciones no es la tecnología, sino algo mucho más profundo. Y Valenti, has dado en el clavo en la intro. Debemos intentar ahondar y ver porque estamos incómodos y buscamos una distracción.
Los cuatro pasos que propone para que nos convirtamos en indistraibles son:
- Controlando los desencadenantes (triggers) internos:
- Debemos analizar las emociones que preceden la distracción.
- Otra manera que tenemos de hacer una tarea que odiamos más placentera, gamificando la tarea.
- Siendo muy conscientes de nuestro discurso interno: primero de todo, la fuerza de voluntad no es algo que se acaba. Segundo, si creemos que tenemos poco autocontrol, probablemente ese mismo sentimiento nos hará tener poco autocontrol. Finalmente, no seamos excesivamente duros con nosotros mismos. Hablémonos cómo hablamos a un amigo.
- Reservando tiempo para la tracción: Nir odia las ‘to do’ lists. Propone time blocking/time boxing, alineado a nuestros valores. Es decir, si queremos practicar más un hobby en concreto, nuestro time blocking debe reflejarlo. Para mi no era una gran novedad, solo tener en cuenta que:
- El time blocking es para todo. Para nuestras aficiones, para nuestra pareja, amigos y familia. Si no programamos también esas cosas, no las vamos a hacer.
- Revisemos regularmente si estamos reservando suficiente tiempo para lo más importante.
- Lo que podemos controlar es el input no el outcome.
- Hackeando los desencadenantes externos: consideremos que no siempre un trigger externo es malo. A veces nos sirven para la tracción. Tenemos que preguntarnos: ¿este desencadenante está a mi servicio o soy yo el que está al servicio de este desencadenante?
- Nos da trucos para el email. Básicamente, solo tocarlo un par de veces al día y cada email tocarlo como máximo dos veces (yo soy más del parecer que solo una si podemos).
- Nos da trucos para las reuniones (nada nuevo para mi): sin agenda clara no hay reunión. Si puede ser solo un email, pues mejor.
- Nos da trucos para el móvil: básicamente, minimalismo, sacar todas las apps de la pantalla principal, notificaciones solo para emergencias. ¡Lo hemos hablado un montón de veces!
- Haciendo pactos: lo más importante es que si no hacemos los otros tres pasos, nos será muy difícil cumplir con nuestros pactos. Algunas recomendaciones:
- Pactos de compromiso previo: apuntarse a un curso, un entrenador personal, reservando a alguien que nos cuide a los niños…
- Pactos de esfuerzo: por ejemplo con grupos de mastermind, con coworkings remotos…
- Pactos de precio: si no hago X, voy a pagar Y
- Pactos de identidad: categorizarse como indistraibles, veganos, creativos, músicos, nos hace amoldarnos a nuestra identidad.
Este es el cuerpo principal del libro. Luego tiene varias secciones de como aplicar todo esto al equipo de trabajo, a los niños (super interesante y que me reservo para otro episodio) y relaciones. Pero bueno, pasemos al debate y aplicamos todo esto a casos prácticos.
Debate y preguntas
- ¿Cuáles son los 3 desencadenantes internos que más frecuentemente os hacen distraer?
- Adria: aburrimiento, ansiedad, duda
- Alberto: aburrimiento, trabajo que no me apetece hacer
- Roberto: exceso de trabajo, duda, necesito tiempo para procesarlo
- Valentí: exceso de trabajo, hambre, no salir a correr
- ¿Y desencadenantes externos?
- Adria: Las pestañas de Chrome, el email. Ya he controlado el móvil de manera quizá un poco radical.
- Alberto: A veces el mail, poco sol (día malo), móvil.
- Roberto: Notificaciones, poco sol.
- Valentí: Hay pocos, quizás cuando el día está nublado y a punto de llover.
Cierre
Gracias por estar ahí, al otro lado del micro. Nos despedimos hasta el miércoles que viene a las 12:12 horas. Aunque nos podéis escuchar cuando os dé la gana, que para eso esto es un podcast.
¡Hasta el miércoles que viene, os deseamos muy buenas y creativas jornadas!
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